Estoy embarazada y creo que me pudo haber dado ZIKA?

Nuestro país se encuentra entre los países donde existe poco control del mosquito Aedes aegypti, el cual es el transmisor del virus del Dengue, Chikungunya y Zika. En este sentido debemos orientarnos en la prevención de la picada del zancudo.

Los síntomas del Zika son muy inespecíficos y pueden ser confundidos por otras enfermedades, entre los síntomas se encuentra la fiebre, malestar general, dolores articulares, rash, y conjuntivitis. Sin embargo, no a todas las pacientes les dan todos los síntomas, por lo que es difícil determinar el diagnóstico exacto. Existen pruebas de laboratorio que se deben de tomar durante los síntomas y otras posteriormente para lograr hacer el diagnóstico preciso (PCR-Zika, IgMZika).

Se ha descrito que si la paciente le dio la enfermedad no debería embarazarse en los siguientes dos meses posteriormente, además se ha reportado que hay probabilidad de transmisión sexual, por lo que sí a la pareja le ha dado la enfermedad no debería tener contacto sexual sin protección durante seis meses.

Si la paciente sospecha que le dio esta enfermedad durante el primer trimestre del embarazo principalmente, debe de acudir a su médico para que le dé un seguimiento de su embarazo. Este consistirá en establecer si realmente tiene o tuvo la enfermedad, el seguimiento del crecimiento y desarrollo fetal, y la prevención.

Si se encuentra con alta posibilidad de haberla sufrido, el riesgo de afectación fetal es importante, por lo que se debe establecer un seguimiento ultrasonográfico de la anatomía fetal mensualmente para establecer que el desarrollo cerebral, cardiaco principalmente, sea adecuado.

El uso de los repelentes es importante en nuestro ambiente para evitar la picadura del zancudo, se pueden usar los repelentes que contengan DEET, picaridin, IR3535, y algunos de aceite de limón con eucalipto y  para-menthane-diol, estos son los registrados por la agencia de protección ambiental de USA (EPA).

Estos debe aplicarse a la piel expuesta y sobre la ropa, no aplicar por debajo de ella. No aplicar en cortaduras, ojos, boca. Idealmente debería lavarse la piel luego de salir de los sitios de contacto con el zancudo.

A pesar que el virus se ha detectado en la leche materna en pequeñas cantidades, no afecta al recién nacido por lo que puede continuar la lactancia como habitualmente.

Esta es una enfermedad relativamente nueva y no tenemos mucha información al respecto al momento. No hay vacunas. Por lo que a medida que el tiempo transcurra irán cambiando el manejo de ella.  Al momento lo que debemos hacer es prevención.

Debe de consultar a su médico al momento de presentar la sospecha de la enfermedad.

Dr. Francisco Álvarez Polanco

Ginecólogo – Medicina Materno Fetal

Categoria: Para Pacientes

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